Aquí dejo otra serie de imágenes captadas estos días. Desde la fantástica pose de nuestro querido traductor y amigo Ousmane en la terraza del Ministerio de Minas con vistas al río, pasando por algunas escenas de la ciudad y retrato de niños (es muy difícil describir sus caras cuando se ven reflejados en el visor de la cámara), terminando con la inexplicable acción de un servidor levantando una piedra de 100 kg en las puertas del museo. Las fuerzas allí no sobran pero la simpatía de la gente invita a participar con ellos a hacer cosas que ni por asomo harías en España. De momento la espalda no se resiente.